Todo el mundo tiene dentro de si algún objetivo que le va y le viene que aunque durante un tiempo lo dejes a un lado al tiempo vuelve a aparecer en tu cabeza.
Eso es lo que me ha pasado con el Camino de Santiago, desde que supe de su existencia cuando era un enano no he dejado de decirme que sería una muy buena aventura que correr.
Ya se que es algo que hacen cientos de personal al año y que no es algo imposible pero tiene algo que me llama pero no de cualquier forma, amigos míos lo han hecho en grandes excursiones organizadas otros años donde eran mas de 50 los peregrinos que iban juntas y a mi eso no me llama, prefería hacer lo con un grupo pequeño de gente o yo solo. (Gustos los colores)
Y este año parece que todo se ha puesto de mi lado, mi hermano que es más cabra loca que yo, para su viaje de fin de carrera no quería hacer algo normal como ir de crucero y me dijo que se iba ha hacer el camino en bici y que mi padre que esta recién pre-jubilado, que siempre le ha gustado eso de andar por el campo y que ya hace 15 años hizo el camino en bici, se iba con él.
Era una oportunidad que no podía dejar escapar, con quien mejor que con mi padre y mi hermano para hacer el camino.
Así que después de pensarlo mucho (yo soy así) las ganas de hacerlo y los ánimos de Pili para que lo haga me han empujado a que el próximo 24 de Marzo esté camino de León para desde allí comenzar mi GRAN AVENTURA.
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